LAS PLAGAS EN EL HUERTO

El primer paso para evitar una plaga es tener en cuenta estos consejos básicos:


1. Analiza bien la planta antes de comprarla


2. Compra plantas que se adapten al clima de tu terraza o balcón


3. Elige las plantas que sean resistentes a hongos y otras enfermedades


4. Compra un sustrato sano y de calidad


5. Cuida las horas de exposición al sol y a la sombra


6. Hazles un mantenimiento continuo y adecuado para cada planta


7. Riégalas a primera o a última hora del día





No obstante no siempre es fácil controlar las diferentes variedades de plagas, un buen inicio para combatirlas es identificando qué parásitos están atacando a la planta.





De esta manera, se puede actuar evitando que estos insectos lleguen a nuestros cultivos.





Para ello, os invito a que leáis esta lista en el que se identifican los parásitos más comunes:





Pulgón – Es el más común. Su principal alimento es la savia, que se encuentra en las hojas y los tallos de las plantas, sobre todo en la judía, el guisante, la patata o la col. Podemos identificarlos cuando encontramos deformación de los brotes y de las hojas. Para combatir contra esta plaga un remedio natural es plantar hisopo cuyo olor los ahuyenta o bien tratarla con mariquitas, que son capaces de comer durante 20 días entre 350 y 400 pulgones.





Mosca blanca – como su propio color indica, son insectos blancos que se instalan en el reverso de las hojas de los cultivos de tomates, pimientos, cebollas, calabacín, zanahorias, entre otros. Los daños que suelen causar son el amarillamiento de las hojas o bien la caída prematura de las mismas. Podemos combatirlas plantando albahaca y/o romero.





Araña roja – al igual que la mosca blanca, se instalan en el reverso de las hojas creando unos puntitos amarillos en las mismas. Se encuentran principalmente cuando las temperaturas son altas y el calor es seco. Afecta a gran cantidad de cultivo y se puede combatir cortando directamente las zonas afectadas, pulverizando las hojas con agua y poniendo la planta en un lugar sombrío y fresco o bien tratándolos con ácaros fitoseidos, deprepadores voraces de huevos, larvas y adultos de araña roja.





Trips – similares a las tijeretas, atacan a toda las partes de la planta y sus daños son fácilmente reconocibles: crean una coloración grisáceo-metálica en los frutos, hojas y tallos. Normalmente se aprecian en las tomateras, la judía y la berenjena. Su control es más complicado, puesto que se necesitan unos ácaros específicos que se nutren de las larvas de los trips, Neoseiulus barkerii y Amblyseius cucumeris.





Nemátodos – gusanos microscópicos que encuentran su hábitat en zonas húmedas, sobre todo en los suelos. Es por eso que son típicos en los huertos, puesto que encuentran su alimento en las raíces de las plantas. Son difíciles de reconocer pues los síntomas son similares a los que podría producir la falta de agua o nutrientes. Normalmente afecta a la cebolla, la patata y la berenjena. Un método para combatirla es plantando salvia, puesto que su olor ahuyenta a estos parásitos.





En muchas ocasiones se recurre a los productos químicos para evitar las plagas o para luchar contra ellas. Estos productos son muy efectivos, pero si queremos tener un huerto ecológico es esencial que todos los remedios que utilizemos sean naturales.





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